En 1998 nace Bayarz, una empresa dedicada a ofrecer un nuevo servicio en el diseño y separación de espacios. Porque no es lo mismo un sitio que un espacio, un pasillo que un lugar de paso, un entorno que un exterior o una zona de estar o una sala de estar. Una estructura define un lugar y nuestras estructuras están concebidas para crear nuevos espacios y transformar una idea en un lugar.
Trabajar este espacio requiere un equipo de profesionales cuya experiencia haya transformado cientos de espacios anteriores. Sin embargo, lo que nos permite ofrecer un producto perfecto es la forma de realizar ese producto: el servicio integral es lo que garantiza en este sector unos niveles de calidad por encima de la media. El servicio integral se traduce en los cuatro pasos lógicos que dan como resultado final un producto altamente satisfactorio.
Escuchar al cliente:
o lo que es lo mismo, contar con una oficina técnica que planifica un proyecto. El cliente cuenta y el diseño responde. Hay espacios que no reclaman una única solución sino que permiten múltiples posibilidades. Ofrecer la mejor de todas es cuestión de escuchar.
Construir los productos:
esto nos permite ofrecer un resultado final mejor. Previamente, al diseñar ya sabemos qué posibilidades nos ofrece cada estructura.
Montar los productos:
el montaje es un aspecto a menudo infravalorado, hasta que una esquina sobresale, las placas no enganchan bien o los montadores desconocen qué hacer ante una imperfección. Es ese momento cuando cobra importancia la persona que sabe cómo se imaginó, se diseño y se fabricó una estructura. Por eso, diseñamos, fabricamos y lógicamente montamos.
Montadores profesionales:
llevar a cabo todo esto, solo es posible con un grupo de profesionales cualificados y experimentados que, al patentar y diseñar cada proyecto, pueden garantizar un trabajo de gran calidad.
Productos y diseños exclusivos:
Muchos de los sistemas sobre los que trabajamos – Taysan e Igora – son exclusivos puesto que están ideados y registrados por Bayarz. Por esta razón, conocemos como nadie el antes y el después, o lo que es lo mismo, la versatilidad que ofrecerá en un determinado espacio.